Paralelamente a la realización del Plan integral de Turismo de cualquier municipio, es necesario definir en cómo queremos el pueblo. Todos tenemos en estima a nuestro pueblo, -en mi caso, Cuevas del Campo-, pero cualquier persona que viene de fuera lo define como feo. Muy a pesar nuestro, no les falta razón, esperan un pueblo típico de Andalucía con las fachadas de las casas encaladas y típicos tejados rústicos. Pero, se encuentran con un panorama muy diferente, casas de diferentes colores, unas de granito, otras de cal, otras de ladrillo, otras pintadas en atrevidos colores. Aunque lo que más llama la atención son los tejados de chapa y los de uralita.
¿Cómo hacer un pueblo más armónico y que nos recuerde a los pueblos blancos de Andalucía? La solución pasa por elaborar una nueva ordenanza municipal que regule la estética de los edificios y casas que se construyan a partir de ahora, estableciendo el color blanco como el color obligatorio para las fachadas. ¿Qué pasa con aquellas casas que ya están construidas? Queda la posibilidad de incentivar a aquellos propietarios que rehabiliten sus viviendas o hagan otras en este sentido con una importante reducción del ICIO siempre y cuando se comprometan a cambiar la fachada a color blanco o realicen un cambio en los tejados y azoteas sustituyendo las chapas o uralitas en favor de las tejas (en diferentes tonalidades).
En cuanto a las casas-cuevas, puede ser utilizado alternativamente la típica piedra o bien el color blanco de la cal.
Ejemplos de modelos de pueblos que podemos considerar atractivos.
Pero las actuaciones del pueblo no sólo deben de centrarse en las casas sino también en las vías públicas; si es un pueblo del interior deben de utilizarse materiales en sintonía con el terreno como las calles hechas con piedras del río, o poniendo en el asfalto detalles. En todo caso debe tenerse en cuenta siempre el clima.
Pero hay más detalles a la hora de configurar la ciudad, como el mobiliario urbano: las farolas, los bancos, las señales, las placas con el nombre de las calles o incluso las fuentes, todo depende del toque que queramos darle a nuestro pueblo.
También es importante el arbolado, durante los últimos años hemos asistido al corte de los árboles de Puerta Real sin que fueran sustituidos por otros. Como consejo también pondría jardineras y utilizaría especies autóctonas que consuman poca agua para sobrevivir como los rosales o el romero.
¿Y a vosotros cómo os gustaría que fuera vuestro pueblo? Podéis dejar aquí vuestros comentarios.
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